Hoy no tengo nada que decir. Nada sobre lo que escribir.
Hoy se me ha hecho tarde y me siento cansada, con ganas de cerrar la persiana y volver a casa.
Hoy me sobran las palabras, todo parece estar de más y escribo y borro y al final siempre regreso al mismo punto, al de la hoja en blanco.
Así que hoy, con vuestro permiso, no hay entrada, o bueno, sí que la hay, pero no una entrada como las de siempre.
La entrada de hoy está falta de contenido, falta de ideas creativas y llena de piernas cansadas y de espalda encogida y de algún bostezo y de miradas al reloj y de repaso a la agenda y de agobios por el trabajo que no he terminado.
Así que me despido, y mañana ya será otro día.
Hoy no tengo nada que decir. Nada sobre lo que escribir.
Imágenes vía Pinterest.
el tornillo que te falta 
Tranquila, la inspiración volverá :)
Pero esa espalda encogida no me gusta nada!!!
Es necesario escuchar el cuerpo o la mente, detenerse, darse permiso de no hacer nada. Un abrazo.
Carlos.
Sin embargo has dicho mucho! que descanses!