Para celebrar que hoy es festivo, San Ignacio nada más y nada menos, hoy nos descalzamos, nos ponemos cómodos y nos sentamos a tomar unas tapas y una buena cerveza fresquita en el chiringuito de la Barceloneta La Guingueta.
Un lugar interesante por dos motivos: El primero es que el proyecto es uno de los últimos trabajos de la interiorista Sandra Tarruella.
El segundo es que el local está bajo la batuta del chef Carles Abellan, que ya cuenta con otros restaurantes repartidos por todo Barcelona, entre ellos el Tapas 24 que recuerdo con especial cariño por su buena comida y porque en ese local me pasó una de las anécdotas más mágicas de mis años en Barcelona.
«La Guingueta de Barcelona delante del mar, de nuestras playas, son un referente a nuestras tradiciones y a nuestra ciudad, que en verano, con el buen tiempo ofrece de una manera informal, un servicio de bebidas, helados, bocadillos, ensaladas y tapas a nuestros bañistas para coger fuerzas y volver a disfrutar de las playas.»
Habrá que ir a probarlo, ¿no os parece?
Imágenes © Meritxell Arjalaguer. Vía: Sandra Tarruella.
el tornillo que te falta 
Casi había olvidado esa «anécdota», el karma!! si lo vuelvo a pensar si que fue mágica de verdad y me alegro compartirla contigo. :)
Genial proyecto sin lugar a dudas porque mantiene el «Look» de un chiringuito (como los materiales que utiliza, maderas…) pero con toques que le hacen totalmente especial!! Feliz jueves!
Ay mi Lauli a mi también me encantó compartirlo contigo! Como con muchos otros recuerdos que tenemos y los que vendrán!! :)