Me quedan unas dos horas para cerrar la persiana y cogerme estos tres días de fiesta… Pero antes de irme como el Correcaminos os dejo la entrada de hoy: la tarjeta de visita más original y «currada» que he visto en mucho tiempo.
Dejadme que os explique porque este diseño tiene su proceso… Para empezar tenéis que saber que es la tarjeta de visita de un chef. En la imagen superior podéis ver el logo, y la tarjeta antes y después de cocinarla. Sí… habéis leído bien… cocinarla.
Como en toda buena receta, no pueden faltar los ingredientes y los materiales que se necesitan para realizarla: Las cartulinas, los limones, un paño, un cuchillo,… Y aquí viene el proceso, que básicamente consiste en hacer una estampación de unos sellos impregnados en jugo de limón, sobre las cartulinas…
Para después hornearlas…
El resultado final es una serie de tarjetas de visita tostadas al gusto, con un tono dorado muy apetecible!
Bon appétit!