Hace unos días, Maria Eugenia publicó en su blog La Bici Azul este apartamento escandinavo de 58 metros cuadrados y me ha parecido que tenía que traérmelo aquí para enseñároslo también a vosotros.
Nos situamos en Estocolmo, en una construcción de 1894. El propietario de este apartamento es un soltero que, como podéis comprobar en las imágenes, ha sabido sacar muchísimo partido a los 58 metros cuadrados de los que dispone su casa.
Sin duda, el elemento con más peso estético de toda la casa es la pared que divide el salón y el dormitorio, formado por unas inmensas cristaleras con carpinterías de hierro.
Tanto el mobiliario, como las luminarias, son de estética industrial. Además, también encontramos numerosos objetos ready-made, como la mesita baja del salón, la de la tele o la cama, fabricadas con cajas y palets.
Todo un ejemplo de cómo sacar partido a espacios pequeños, utilizando pocos elementos y sin gastar mucho dinero.
Vía La Bici Azul a través de Per Jansson.
No tengo palabras…. In love
¡Qué bonita! ¡Y qué buen partido que le saca! Tiene mucho mérito hacer que un piso de 50 m2 se vea grande y luminoso. El interiorismo escandinavo es sin duda mi preferido.
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