Imagina un lugar donde al entrar te invaden todo tipo de olores fascinantes. Un lugar donde te atienden con amabilidad y pasión.
Imagina un lugar donde los frascos de fragancias, de aspecto antiguo, se almacenan en enormes estanterías que llegan hasta el techo.
Un lugar donde los muebles, las baldosas, las paredes e incluso las luminarias y herramientas de trabajo parecen sacados de otro tiempo.
Un lugar con encanto, con autenticidad y con mucha calidad en una de las calles del barrio parisino Le Marais.
Eso es Le Labo, una perfumería en la calle 7, rue Froissart, que se está convirtiendo en punto de referencia en la ciudad.
Y viendo estas imágenes y leyendo su manifiesto «We believe» la verdad es que lo entiendo perfectamente.
«We believe that there are too many bottles of perfume and not enough soulful fragrances. We believe the soul of a fragrance comes from the intention with which it is created and the attention with which it is prepared. We believe fine perfumery must create a shock – the shock of the new, combined with the shock of the intimately familiar.»
«We believe that fine perfumery must be irreverent. We believe it is more humane to test cosmetics on New Yorkers than on animals. We believe celebrities should pay full price. We believe the future of luxury (hence of perfumery) lies in craftsmanship. We believe in the soulful power of thoughtful hands: hand-picked roses, hand-poured candles, hand-formulated perfumes and handshake agreements.»
«We believe in the passionate souls who work close to us. We believe in Hafiz’s take on life: «Act great, dear. Always act great». We believe New York made us this way, with a dose of Wabi-Sabi and a few lines from Thoreau. We believe we/you should put away our modern tools and take the time to smell the roses along the way. We believe that we are only young once, but we can be immature forever. And we believe that explanation kills art. Therefore, forget about all of this!»
Más sobre el barrio parisino de Le Marais aquí y aquí.
Vía: Stil inspiration. Imágenes © Le Labo Marais.
el tornillo que te falta 
Es incréible, nos encanta Gracias por el descubrimiento :)
Maravilloso a la par que prohibitivo…. Lujo puro, me encanta!
Tiene el aroma de las antiguas reboticas, donde se forjaban tertulias culturales y hasta conspiraciones. ¡Os habéis fijado? La pared desconchada sobre las cajonera parece un mural de Cy Twombly. ¡Que no me lo toquen, por favor!