¡Buenas noches! Antes de bajar la persiana por hoy os dejo con este sorprendente dúplex situado en Kaohsiung, Taiwán.
Y digo sorprendente porque el apartamento tiene apenas 40m², pero esos pocos metros están tan bien distribuidos y aprovechados que acogen sin problemas a una pareja con su hija pequeña.
El proyecto es un diseño del estudio HAO Design, que tal vez os suene por esta otra casa que os enseñé hace unos meses.
El objetivo de Block Village, como se ha bautizado a este proyecto, no es sólo «satisfacer las necesidades de espacio básicas y la demanda de almacenamiento de un hogar. En este caso, se ha prestado especial atención a dar placer al sentido de la vista mientras los habitantes caminan por su casa».
«La mayor ventaja del espacio es que es completamente exterior. La sala de estar y el comedor-cocina, en la parte delantera, se han concebido como el espacio principal de vida.» Además, se ha aprovechado el hueco debajo de la escalera como zona de trabajo y se han colocado estanterías a medida de suelo a techo, del mismo modo que se ha hecho en toda la pared principal del salón, dejando espacio más que suficiente para almacenaje.
«Con el fin de crear una atmósfera sencilla y armoniosa, se ha apostado por la textura llana de la madera de pino y un suave color verde», en diferentes gamas, que recuerdan al té matcha.
La planta alta es el área de los espacios privados de la casa. Allí encontramos el dormitorio principal y el vestidor. El baño se encuentra justo debajo de este.
El éxito del proyecto reside en la inteligencia con la que se han diseñado los espacios, no dejando ni un sólo metro cuadrado desaprovechado, y se han conectado unos a otros mediante el juego de alturas, de luces y sombras, de elementos transparentes y opacos y de diferentes tonalidades que crean profundidades y delimitan el espacio sin crear ambientes claustrofóbicos. ¡Perfecto!
Vía: AD Architectural Digest. Images © HEY!CHEESE.