¡Buenos días! ¡Por fin viernes! Y para celebrarlo os traigo un apartamento precioso en Göteborg.
Por cierto, nunca os he contado una de mis aventuras viajeras. Resulta que hace dos años nos fuimos de viaje a Estocolmo y Copenhague (en su día ya le dediqué algunas entradas en este blog, como estas dos que os acabo de enlazar).
El caso es que nos cancelaron el vuelo de Bilbao a Estocolmo, perdimos un día entero de viaje y por si esto fuera poco, cuando cogimos el tren unos días después para cambiar de ciudad, de Estocolmo a Copenhague, éste se estropeó y nos dejó tirados en Göteborg.
Me tenéis que ver sentada en la maleta, en medio de un andén desértico, pensando en las cien millones de entradas que había hecho sobre Göteborg en este blog, mientras Timi trataba de conseguir otro billete de tren. ¡Total que me quedé sin ver nada de la ciudad! Tan cerca y tan lejos!! jajaja Lo bueno es que ya tengo la excusa para volver a Suecia… :)
El caso es que yo no sé si será bonito o no, pero tengo la sensación de que allí no hay una casa fea. Tanta luz, madera cálida, plantas aquí y allá, diseño escandinavo para unos muebles armoniosos y sencillos…
Este apartamento de un solo dormitorio, lo tiene todo, a pesar de su reducido espacio. Nadie como ellos para sacar más de menos y para saber optimizar cualquier espacio a través del diseño.
Y como extra, esta maravillosa lámpara… ¡Un clásico! La lámpara de sobremesa Taccia, diseñada en 1962 por Achille y Pier Giacomo Castiglioni para el fabricante de lámparas italiano Flos. ¡Qué maravilla!
Vía: Bjurfors. Imágenes: Maria Sahlander. Styling: Emma Fischer.